PARA
ENVEJECER JUNTOS NOS COGEMOS LAS MANOS...
Para
envejecer juntos nos cogemos las manos,
yo
miro tu sonrisa, tú miras mi tristeza;
irán
saliendo arrugas en mi alma y tu cabeza
y
canas sobre nuestros espíritus humanos;
idéntica
vigilia caerá en nuestras historias:
ver
al tiempo ir cerrando una a una las ventanas,
me
sonreirás lo mismo que todas las mañanas
y
será como un ramo de flores mortuorias;
tú
eres ese recuerdo que he de tener un día,
yo
soy esa nostalgia que poblará tu frente
cuando
ya sea un anciano, amada, anciana mía;
pienso
en ese futuro tranquilo y arrugado
como
en dos viejos libros qua ya no lee la gente,
con
tanto como habrán, en silencio, aguardado.
De
“Compañía” incluido en Las piedras
(1958-1962)
Autor:
Félix Grande
SI TÚ ME ABANDONARAS TE QUEDARÍAS SIN CAUSA...
Si tú me abandonaras te quedarías sin causa
como
una fruta verde que se arrancó al manzano,
de
noche soñarías que te mira mi mano
y
de día, sin mi mano, serías sólo una pausa;
si
yo te abandonara me quedaría sin sueño
como
un mar que de pronto se quedó sin orillas,
me
extendería buscándolas, con olas amarillas,
enormes,
y no obstante yo sería muy pequeño;
porque
tu obra soy yo, envejecer conmigo,
ser
para mis rincones el único testigo,
ayudarme
a vivir y a morir, compañera;
porque
mi obra eres tú, arcilla pensativa:
mirarte
día y noche, mirarte mientras viva;
en
ti está mi mirada más vieja y verdadera.
De
“Compañía” incluido en Las piedras
(1958-1962)
Autor:
Félix Grande
GENERACIÓN
Félix Grande
Anda no más, , resuelve,
considera
tu crisis, suma, sigue,
tájala, bájala, ájala;
el destino, las energias íntimas, los
catorce
versículos del pan; uántos diplomas
y
poderes, al borde fehaciente de tu arranque!
Alza, alza tu paño;
años, sustancia del olvido; ¡fuera,
en desbandada!
Adolescencia, cállate, vayamos
por orden , narremos la caída: no
parezca
lujo el susodicho ay. Nacer (he aquí
la cuestión)
como has nacido, donde has nacido,
para qué has nacido.
En el mil novecientos treinta y
siete
(quiero decir, vean crónicas, en ese
monstruoso
revulsivo, que luego llaman la
primera piedra)
caí en este andadero, o derrotero;
más claro: en guerra; más lírico: en
fraterna matanza,
cuando cartas son biblias (¡ay
destinatarios!);
más concreto: cuando
mueren mueren mueren mueren
destrozados unos
y otros y unos y otros, y
entonces naces:
madrina Amparo viene a tu bautizo un
día de bombas,
se celebra un modesto llanto por la
ausencia de papá soldado,
faltaban dulces, faltarán,
mamá inunda tu boca de leche con
memoria
en que bebes su poderosa pena que
ella repostaba
en las salas del hospital de sangre
sito en Mérida,
otrora Emérita Augusta.
Mamá desvenda muñones, rebobina
quejidos,
pelea contra coágulos y desgarrones
femeninamente,
espoelea sus retinas frente a las
hemorragias,
se quema en lamentos cocidos, se
hiela entre el cierzo de los
moribundos,
solloza para dar ejemplo;
y después me ponía sus trágicos
pezones en la boca,
ebrios de obuses, apresurados de
sobrevivencia casual,
para que yo chupara mi destino
y cojeara luego con la niñez sin
tronos
(faltaban dulces, faltarán)
oh cálido bautizo, oh pesadilla, oh
fuego de la escarcha, fuego,
fuego!
Memoria: humeas. –Con aquel bagaje
fleté en el tiempo, con aquellas
muletas
di en correr adolescencia adentro;
me fui poblando poco a casi nada
y toda cosa nunca pude olvidar si
era sombría;
hasta que un día supe que mi aquella
enfermedad novena del nacer (he aquí
la cuestión)
abdicó sobre esta larga
convalecencia con recaídas en que ahora
consisto
y a la que llamo mi existencia,
proféticamente.
Memoria: humeas.
Vacilo, dudo, considero, rujo a
destiempo,
y a menudo recuerdo mi Felixín
original
y no sé si pedirle cuentas
o brindarle un sollozo tozudo
que lo ponga contento allá en su
inicio donde
mora inconforme por entre lo
inconforme.
…………
Fragmento del poema “Generación”, incluido en Taranto. Homenaje a César Vallejo
Autor: Félix Grande
,,,,,,,,,
De Charlie Parker a Edith Piaf
un
diluvio de negro spirituals
y
de blanco spirituals llueve
sobre
la civilización;
llueve
piaf; llueve parker, llueven
Manolo
Caracol, Louis Armstrong empapa
Discépolo,
John Coltrane, Billie Holliday.
Es
un agua que se introduce
por
las fisuras de los Parlamentos,
por
las rendijas de los programas,
por
los agujeros de la ONU,
empapada
la estrategia, moja
a
la inmortalidad y la encoge,
hincha
las oscuras maderas
de
los ataúdes y congela
todo
el grandioso fuego de vivir.
Llueve
toda la tarde, llueve
toda
la noche: y tras la ventana
en
que repiquetea la lluvia
ese
diluvio es observado
por
un blanco o un negro
mientras
que suena un saxofón
y
llueve.
Del
poema Por los barrios del mundo viene sonando un lento saxofón incluido en el libro Blanco
Spirituals (1966)
Autor:
Félix Grande (1937- 2014)
Los poemas que preceden pertenecen
al poeta Félix Grande, recientemente fallecido.
Aunque nació en Mérida (Badajoz) el
4 de febrero de 1937, su infancia y juventud , desde los dos a los veinte años,
transcurrió en Tomelloso (Ciudad Real) “ciudad en la que se hizo pastor el
abuelo Palancas “ y donde el mismo poeta , desde los diez hasta los
veinte años, desempeñó diferentes trabajos : oficinista en un almacén,
carpintero, trillador, jornalero de bodega, tendero, cuidador de tres vacas,
recitador en los casinos, guitarrista flamenco y, sobre todo, pastor de cabras.
“El miedo omnipotente de mi madre
ayudó a mi conciencia a existir y a crecer; en ese crecimiento aprendí que la
moral contiene y ejercita la indignación y la piedad; y esa pareja de emociones
establece que mi diálogo con mis contemporáneos no debe producirse sino con la
beligerancia que merecen todas las tiranías, sea cual sea su disfraz
ideológico. Por eso me conmueven unas palabras que escribió Abe Osheroff: Creo
en la libertad del hombre y cualquier sistema que ataque o ponga en peligro ese
derecho es enemigo mío. La libertad no es un lugar ni un estado del ser: es un
camino. Se está andando en él o se está fuera de él.”
A los veinte años, en 1957, se
trasladó a Madrid y continuó desempeñando oficios alejados del ámbito literario
hasta que en 1961, entró a formar parte de la revista Cuadernos hispanoamericanos, órgano literario de la Agencia Española de
Cooperación Internacional, de la que fue nombrado director entre 1983 y 1996.
Se le incluye o relaciona con la generación de poetas que
se irrumpieron en la década de
1960 y renovaron la lírica española como José Manuel Caballero Bonald, Ángel
Crespo, Jaime Gil de Biedma o Claudio Rodríguez.
Su primer libro publicado Las piedras (1964), premio Adonáis, es el resultado de una reunión de
poemas que, a la manera machadiana, imbrican esencia y tiempo histórico. Hay
diferentes combinaciones métricas: romances, romancillos, sonetos alejandrinos
-como los que obran en “Compañía” y dos de los cuales figuran como muestra en
esta entrada- y serventesios
también de catorce sílabas, así como una declaración final de amor a la
palabra.
Según el propio autor: “No aspira a
tener más parentesco con Machado que el de ciertos intentos de aprendizaje
expresivo y vital, una especie de imitación balbuciente que se puede definir
como un aprender a mirar ”
Posteriormente
fue evolucionando hacia temas abstractos, centrados en el lenguaje mismo, y
hacia el erotismo: Música amenazada
(1966), Blanco Spirituals (1967). En
1971 publicó sus obras completas en el libro Biografía. En 1978 recibió el Premio Nacional de Poesía por Las
rubáiyátas de Horacio Martí: especie de heterónimo inspirado en Abel Martín de Machado y Ricardo Reis de Pessoa.
Nuevamente recopiló su obra poética en Poesía completa: 1958-1984, que fue revisada en 1989. Todas estas ediciones demuestran
su preocupación estilística y formal sobre sus escritos.
En
La noria muchos poemas rinden homenaje a maestros y
compañeros, en forma de expresa o tácita intertextualidad. Entre los cuales:
Juan Carlos Onetti, Rubén Darío, Antonio Machado, Dámaso Alonso, Quevedo, César
Vallejo- a quien ya en su día homenajeó con Taranto- ,Luis Rosales, Fernando Quiñones, José Hierro…
La
cabellera de la Shoá (2010) es una
composición sobre el Holocausto y consta de varios centenares de versos, en su
mayoría libres, con alternancia de tiradas en prosa y endecasílabos pareados,
más algún soneto. La cabellera de la
Shoá –o del Holocausto- es la trenza simbólica formada por los cabellos de las
víctimas de la barbarie nazi.
Esta
es la cabellera de la Shoá.
Blacanegrambarinacenicienta
y
ensangrentada de amarillo y de llanto.
Calla
más que el silencio y está ciega.
Lo
ve todo. Retumba.
En narrativa destacan sus obras: Las calles (1965), Por ejemplo,
doscientos
(1968), Parábolas (1975), Lugar siniestro este mundo, caballeros (1980), Fábula (1991), Decepción (1994), El marido de
Alicia
(1995), Sobre el amor y la separación (1996) y La balada del abuelo Palancas (2003).
Entre sus libros de ensayo: Apuntes de poesía española de
posguerra
(1970) y Federico García Lorca y el flamenco (1992), pues es un gran
aficionado, conocedor y crítico de flamenco, tema sobre el que ha escrito Agenda
flamenca
(1987), Memoria del flamenco (1995) o Paco de Lucía y Camarón de la Isla (2000).
Son varios los premios que han ido
jalonando su trayectoria entre los
cuales, el ya mencionado Adonais en 1963, Alcavarán en 1963, Guipúzcoa en 1965, Eugenio
d'Ors en 1965, Gabriel Miró en 1966, Casa de las Américas en 1967, Nacional
de Literatura en 1978, Barcarola en 1989 y
Premio Nacional de Letras 2004.
Casado con la poeta Francisca
Aguirre y , a su vez padre de la también poeta Guadalupe Grande, Félix Grande falleció en Madrid el 30 de enero de 2014, a los 76
años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario