CAPRICHO 42
TÚ QUE NO PUEDES
Dos hombres llevan sobre sus espaldas
dos asnos montados.
Los pobres y las clases útiles de la
sociedad, son los que llevan a
cuestas a los burros o cargan con todo el peso de las contribuciones del estado
¿Quién no dirá que estos
caballeros son caballerías?
La piedra está, a
cincel, lista y tallada.
El agua reventó
la tierra y fuente
corre y canta. La
piedra le hace puente.
El río lleva el
agua reposada.
La piedra en
sillería y muro alzada.
El fuego quema el aire y dulcemente
juega y ríe. La
piedra dulcemente
le hace casa y
escudo en la fachada.
La fuente, el
río, el puente nombre tienen,
la casa historia,
escudo y señorío;
el tiempo gloria,
fama y apellido.
Mientras tanto
las piedras que sostienen
y aguantan
estructuras, peso y frío
nadie sabe ni el
nombre que han tenido.
Pertenecientes al libro Risa
y ternura de unos papeles (Reflexiones a los Caprichos y aguafuertes de Goya) de Damián Iribarren
Edición: María Socorro
Latasa Miranda
Sahats, 2006
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